martes, 22 de noviembre de 2011

Los sentimientos

 
Los sentimientos

Cuentan que una vez se reunieron en un lugar de la tierra todos los sentimientos y cualidades de los hombres. Cuando el ABURRIMIENTO había bostezado por tercera vez, la LOCURA, como siempre tan loca, les propuso:
- ¿Jugamos al escondite?
- La INTRIGA levantó la ceja intrigada y la CURIOSIDAD, sin poder contenerse, preguntó: "¿Al escondite? y como es eso?"

- Es un juego - explicó la LOCURA - en que yo me tapo la cara y comienzo a contar desde uno hasta un millón mientras ustedes se esconden y cuando yo haya terminado de contar, el primero de ustedes al que encuentre, ocupara mi lugar para continuar el juego.

El ENTUSIASMO bailo secundado por la EUFORIA, la ALEGRÍA dio tantos saltos que termino por convencer a la DUDA, e incluso a la APATÍA, a la que nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar. La VERDAD prefirió no esconderse ¿para qué?, si al final siempre la hallaban, y la SOBERBIA opino que era un juego muy tonto aunque en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido suya, y la COBARDÍA prefirió no arriesgarse...

- Uno, dos, tres... - comenzó a contar la LOCURA.

La primera en esconderse fue la PEREZA que, como siempre, se dejo caer tras la primera piedra del camino. La FE subió al cielo, y la ENVIDIA se escondió tras la sombra del TRIUNFO, que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol mas alto. La GENEROSIDAD casi no alcanzaba a esconderse, cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos: que si un lago cristalino, ideal para la BELLEZA; que si el bajo de un árbol, perfecto para la TIMIDEZ; que si una ráfaga de viento, magnifico para la LIBERTAD. Así que termino por ocultarse en un rayito de sol. El EGOÍSMO, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo... pero solo para el.

La MENTIRA se escondió en el fondo de los océanos !mentira! en realidad se escondió detrás del arco iris, y la PASIÓN y el DESEO en el centro de los volcanes. ¿El OLVIDO? se me olvido donde se escondió... pero no es lo mas importante.

Cuando la LOCURA contaba 999.999, el AMOR todavía no había encontrado un sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que diviso un rosal y, enternecido, decidió esconderse entre sus flores.

- !Un millón! - contó la LOCURA y comenzó a buscar.

La primera en aparecer fue la PEREZA, solo a tres pasos de la piedra, después se escucho a la FE discutiendo con Dios en el cielo sobre Zoología. Y a la PASIÓN y al DESEO los sintió en el vibrar de los volcanes.

En un descuido encontró a la ENVIDIA y, claro, pudo deducir donde estaba el TRIUNFO, al EGOÍSMO no tuvo ni que buscarlo, él solito salió disparado de su escondite, que había resultado un nido de avispas.

De tanto caminar sintió sed y, al acercarse al lago, descubrió a la BELLEZA, con la DUDA resulto mas fácil todavía, pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aun donde esconderse.
Así fue encontrando a todos, el TALENTO entre la hierba fresca, la ANGUSTIA en una oscura cueva, la MENTIRA detrás del arco iris y hasta el OLVIDO, al que ya se le había olvidado que estaba jugando a los escondidos.

Pero solo el AMOR no aparecía por ningún sitio.

La LOCURA busco detrás de cada árbol, bajo cada arroyo del planeta, en la cima de las montañas y, cuando estaba por darse por vencida, diviso un rosal con sus rosas... tomo un palito para no pincharse y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto escucho un doloroso grito, al dañar en los ojos al AMOR. La LOCURA no sabia que hacer para disculparse, lloro, rogó, imploro y prometió ser su lazarillo para siempre.

Desde entonces, desde que por primera vez se jugo al escondite en la tierra,

El AMOR es ciego
y la LOCURA lo acompaña siempre

La interioridad

La interioridad de las personas

La interioridad del ser humano.

El discípulo debe adquirir la convicción de que la verdadera esencia del hombre reside en su interioridad, no en lo externo. Aquel que sólo se considere como resultado del mundo físico, no podrá progresar en el discipulado oculto, pues uno de los fundamentos de éste es sentirse un ser anímico-espiritual. El que desarrolle en sí mismo tal sentimiento, será capaz de distinguir entre la obligación interior y el éxito exterior; aprenderá a distinguir que uno no puede compararse directamente con el otro. El discípulo ha de encontrar el justo medio entre lo que le imponen las condiciones exteriores y lo que él mismo reconoce como lo correcto para su proceder. No debe tratar de persuadir a los demás de cosas para las que ellos no pueden tener la debida comprensión, pero también debe ceder a la tentación de amoldar su actuar a lo que ellos puedan aprobar. El consentimiento a sus verdades lo debe buscar únicamente en el estado de su propia alma sincera que aspira al conocimiento. Por otra parte, tiene que estar dispuesto a aprender de los demás todo cuanto le sea posible, a fin de sondear lo que sea lo útil y lo benéfico. De esta manera, desarrollará en sí mismo lo que la ciencia de lo oculto llama la "balanza espiritual". En uno de sus platillos se encuentra un "corazón abierto" a las necesidades del mundo; en otro, la "firmeza interior y la perseverancia inquebrantable".
Tercer trimestre
TEMA 1:
lA INTERIORODAD.